EUROPA PRESS/EFE
El presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, hizo ayer su
particular homenaje a las víctimas del holocausto nazi con una
ofrenda floral en la cripta del recuerdo del Museo del Holocausto
en la ciudad de Jerusalén (Israel). En esta ocasión, y a diferencia
de lo que ocurrió el jueves en Tel Aviv, junto a Maragall participó
en la ofrenda el líder de ERC, Josep Lluís Carod-Rovira, que
acompaña al presidente en su viaje, ya que la bandera española no
apareció por ningún lado.
La corona de flores encargada por la Embajada española en Israel, a petición de la Generalitat, volvía a llevar la bandera española añadida con alfileres a la banda con la bandera catalana, pero fue retirada por representantes de la Embajada antes de que llegara la delegación para evitar nuevas polémicas.
Fuentes diplomáticas insistieron en que fue la floristería quien incluyó la banda con la bandera española en la que se podía leer «Generalitat de Catalunya». Además, se reiteró la «sorpresa» de la Embajada española ante la presencia de la bandera española en el monumento donde ayer Maragall hizo la ofrenda sin Carod, ya que «es la primera vez que hay una bandera que no sea la israelí».
Las críticas a los incidentes del jueves y de ayer no se hicieron esperar. Así, el secretario general del PP, Angel Acebes, acusó al Gobierno de «humillarse ante el independentismo». Menos duras, fueron las protestas de CiU y de los populares catalanes.