EFE/EUROPA PRESS
El Gobierno insistió ayer en la firmeza de la lucha antiterrorista
y en que sólo se dialogará con ETA si deja las armas y sin un
precio político, en respuesta al PP, que de nuevo pidió la retirada
de esa oferta de diálogo y advirtió de que a partir de ahora ETA
«va a fijar» y a «marcar los tiempos». Los enfrentamientos entre
PSOE y PP continuaron ayer después de que el martes el Congreso
aprobara, con el apoyo de todos los grupos excepto del PP, una
propuesta de resolución presentada por los socialistas que abre la
puerta al diálogo sin condiciones políticas entre el Gobierno y ETA
si la banda terrorista renuncia a las armas.
En la polémica intervino el portavoz de la ilegalizada Batasuna, Arnaldo Otegi, quien dijo que «no es posible superar el conflicto político y armado sin hablar con ETA» e indicó que la resolución aprobada el martes supone asumir la propuesta presentada por su formación en el velódromo donostiarra de Anoeta en noviembre de 2004.
Otegi calificó de «positivo» que todos los grupos del Congreso de los Diputados, excepto el Partido Popular, hayan respaldado una propuesta de resolución sobre el diálogo con la banda terrorista. Esta propuesta abogaba por crear una mesa de diálogo entre ETA y el Gobierno y otra entre los partidos políticos vascos.El ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, replicó a Otegi que el Gobierno sólo iniciará un proceso de diálogo cuando ETA «comprenda que está definitivamente derrotada y que no tiene ninguna posibilidad de imponerse». Por su parte, el secretario general del PP, Angel Acebes, manifestó que el portavoz de Batasuna dio ayer al presidente del Gobierno su «bienvenida al 'club de Anoeta'» y a la defensa de los «postulados de ETA». «Parece increíble que se haya llegado hasta aquí», resaltó.
«Otegi le ha dado la bienvenida a su club a Zapatero -sentenció el 'número dos' de PP-. Hace pocos días lo hizo Carod-Rovira, felicitándose por la incorporación del presidente del Gobierno al Club de Perpignan, el de la negociación con ETA. Hoy ha hecho lo propio Otegi».