El déficit por cuenta corriente sigue su escalada. Hasta febrero ascendió a 7.349 millones de euros, lo que supone un incremento del 168% respecto al mismo mes del año anterior. Según los datos difundidos por el Banco de España, este crecimiento es el resultado del alza del déficit comercial (creció un 49% en los dos primeros meses del año) y de los mayores saldos negativos de las balanzas de rentas y transferencias corrientes.
El mayor superávit de la balanza de servicios no logró compensar el déficit comercial, entre otras razones, porque el saldo positivo de los ingresos por turismo cayó un 4,3%. Al mismo tiempo, la necesidad de financiación de la economía española se dispara, situándose en una cantidan que triplica la de enero y febrero de 2004.
La situación de los últimos meses se mantiene y la ampliación del superávit de la balanza de servicios no puede compensar la evolución del resto de las partidas de la cuenta corriente, que mide los ingresos y pagos al exterior por intercambio de mercancías, servicios, rentas y transferencias. Lo más grave de la coyuntura es el déficit de la balanza comercial, que se amplió desde 6.058,8 millones de euros en los dos primeros meses de 2004 hasta 9.074,2 en el mismo periodo de este año 2005, en un contexto de fuerte dinamismo de las importaciones, que crecieron un 12,8 por ciento anual, y de un aumento de las exportaciones de tan sólo un 2,9 por ciento.En la balanza de servicios, el superávit acumulado se amplió hasta alcanzar los 2.784,1 millones de euros, lo que supone un incremento del 5,9 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior. Este aumento fue el resultado fundamentalmente de la corrección del déficit del resto de servicios, ya que el superávit de la rúbrica de turismo y viajes cayó un 4,3 por ciento, hasta situarse en 3.117 millones de euros. El déficit de los otros servicios se redujo un 47 por ciento, hasta 332,9 millones de euros.