El ex secretario general del PCE Santiago Carrillo sufrió ayer un intento de agresión de un grupo de ultras del que salió ileso, aunque sí fueron golpeadas varias personas que asistían a una tertulia en una librería de Madrid, ataque que fue condenado por los gobiernos central y regional y por los partidos. Carrillo acudió ayer por la mañana a la librería Crisol de la calle Juan Bravo -en el madrileño distrito de Salamanca- donde participó (a pesar de los hechos) en una tertulia sobre el libro «Historias de las dos Españas», del historiador Santos Juliá.
Al llegar al establecimiento, Carrillo fue recibido con gritos de «asesino, asesino» por parte de un grupo de unos 30 ó 40 ultras, quienes le intentaron agredir, lo que fue impedido por responsables y clientes del establecimiento, que protegieron al ex dirigente comunista hasta la sala donde debía tener lugar el acto. Los ultras, que lanzaron varios panfletos con la foto de Carrillo y el texto: «asesino, genocida, ni olvido ni perdón, La Falange», lograron golpear con los palos de las banderas que portaban a Santos Juliá, al ex ministro socialista Claudio Aranzadi, a Andrés Galdón, de la editorial Santillana, y a los periodistas Pedro Sánchez Ramos y María Antonia Iglesias, a la que metieron un puñado de panfletos en la boca.
Los violentos golpearon a patadas y empujaron la puerta donde se iba a celebrar el acto, y al no lograr su objetivo, comenzaron a destrozar el local, arrojando al suelo los libros y rompiendo las estanterías que encontraban a su paso al tiempo que proferían insultos a Carrillo y lanzaban panfletos y carne picada.