La policía ha analizado con minuciosidad los pasos que siguieron en Balears (Mallorca y Eivissa) los terroristas a quienes vinculan con los atentados del 11-S en Estados Unidos y el 11-M en Madrid. Está documentada la presencia en Palma de Ahmed Brahim, propietario durante más de una década de un lujoso piso en el Passeig Marítim, supuesto financiero de la red Al Qaeda y divulgador de mensajes del Islam a través de Internet, y de Jamal Ahmidan, «el Chino», que se hizo pasar por cocainómano para confundir a los investigadores. «El Chino» fue visto en Eivissa una semana antes del 11-M: él coordinó el atentado en los trenes de Madrid que mató a 192 personas. Poco después, se inmolaba en el piso de Leganés con otros terroristas. También, la policía maneja informes que dan por sentada la visita a las Islas de Younnes Alouia y Mamdouh Mahmud Salim. El primero se habría entrevistado con «El Chino» en Eivissa, y el segundo se alojó en el piso palmesano de Brahim antes de ser detenido en Estados Unidos bajo la acusación de traficar con material radioactivo y ser una de las personas de confianza de Bin Laden.
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