La Fiscalía pide 48 años de cárcel para José Luis Urrusolo Sistiaga, que será juzgado a partir de mañana en la Audiencia Nacional por su presunta participación en dos atentados de ETA cometidos en 1991 en Palma de Mallorca y un atentado fallido. El fiscal jefe, Eduardo Fungairiño, considera a Urrusolo Sistiaga autor de dos delitos de estragos y otros dos de lesiones, por los que pide 24 y 12 años de prisión, respectivamente, y de uno de tenencia de explosivos, por el que solicita 12 años.
Según las conclusiones del fiscal, Urrusolo Sistiaga dirigía el «comando Ekaitz» de ETA cuando, en unión de otra persona no identificada, se trasladó a Palma de Mallorca en el verano de 1991 para la comisión de varios atentados. El 30 de julio de ese año, presuntamente hizo estallar un coche-bomba estacionado frente a la puerta principal de la residencia de oficiales de la Plaça Porta des Camp, lo que produjo daños en la fachada y heridas a una persona.
Ese mismo día, se registró la explosión de cuatro artefactos interconectados y presuntamente colocados por Urrusolo en un chalé de Palma situado en la calle Arquitecto Bennássar, cuya planta baja quedó destrozada. También quedó herido un alférez que había alquilado la vivienda. En este atentado, el comando había preparado varias bombonas de butano que debían explotar al ser accionado un contemporizador. Un fallo en la fuente de energía evitó que se incendieran los bidones.
El 30 de octubre de 2001, fue hallado un vehículo de alquiler en la calle San Diego de la Platja de Palma, en el que Urrusolo había supuestamente colocado otro artefacto «con la intención de hacerlo estallar contra algún objetivo», aunque «no encontró a la víctima» y lo abandonó. Los miembros de desactivación de explosivos tuvieron que activar el artefacto mediante explosión controlada, lo que destruyó el vehículo y causó daños a otros cercanos.