Los partidos políticos han reaccionado de forma dividida ante la nueva iniciativa de la ilegalizada Batasuna, que ha exigido hoy al lehendakari que no oficialice la convocatoria de elecciones autonómicas mientras «no esté garantizada» su participación en los comicios. Los dirigentes de Batasuna, Pernando Barrena y Raquel Peña, arropados por Arnaldo Otegi y Joseba Permach entre otros integrantes de la Mesa Nacional de esta organización, defendieron su «derecho» a presentarse a las elecciones vascas y anunciaron la presentación en la cámara vasca de una propuesta para exigir al Gobierno de Ibarretxe que garantice el derecho de todas las opciones a presentarse a las elecciones.
Cerca de una hora antes de conocerse esta iniciativa, el lehendakari, Juan José Ibarretxe, había anunciado que el tripartito que sustenta su Gobierno, PNV, EA y EB, va a ser «un agente que va a trabajar activamente para que Batasuna pueda participar en las elecciones» autonómicas y aseguró que el PP y el PSOE «pueden permitir que se presenten a las próximas elecciones en 24 horas».
En referencia a esta apelación del lehendakari para que el Gobierno posibilite la participación de Batasuna en los comicios, el presidente del Senado, Javier Rojo, explicó que Ibarretxe «sabe perfectamente que eso está en manos de los jueces y criticó con dureza lo que, a su juicio, es un interés del lehendakari por «manipular en beneficio propio» la situación.
El también secretario general del PSE-EE de Alava aseguró que «lo único que pretende con todo este debate es que los votantes de Batasuna le voten a él, y lo que hace falta es que lo diga», a la vez que dijo que Batasuna «lo tiene muy fácil» para concurrir a las elecciones, porque «tienen que hacer lo que hacemos los demás: ajustarse a los principios constitucionales y no participar en los discursos que tienen que ver con el terrorismo».
El presidente nacional del PP, Mariano Rajoy, opinó, por su parte, que tiene «muy claro que Batasuna no puede presentarse» a los comicios vascos «porque los tribunales de justicia no lo aceptan y siempre defenderé, como cualquier persona, que los terroristas no participen» en elecciones, a la vez que destacó que «no hay ningún país del mundo donde un grupo terrorista se presente a las elecciones».La presidenta vasca del PP, María San Gil, también se refirió ayer a este debate y aseguró que cuando el lehendakari Ibarretxe defiende que Batasuna pueda comparecer a las elecciones vascas «lo hace con la boca pequeña» porque lo «único que de verdad le interesa son sus votos», y añadió que esta es la forma «mezquina de cara a las víctimas del terrorismo» que Ibarretxe tiene para intentar captar todos los votos de la formación abertzale.
El coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, consideró que lo mejor que puede hacer Batasuna es condenar la violencia para así «ayudarnos a todos y ayudarse a sí misma» y que se pueda presentar a las elecciones, y estimó que el lehendakari coincidirá en que esta es la mejor manera de conseguirlo. Sobre esta posible derogación, pero en otro sentido, habló el coordinador de EB-IU, Javier Madrazo, quien recomendó a Batasuna que, en lugar de pedir al lehendakari que no convoque las elecciones hasta que pueda concurrir la formación abertzale, se dirija al PSOE «porque es el que tiene en sus manos la posibilidad de derogar la ley de partidos».