El presidente del Parlamento vasco, Juan María Atutxa, afirmó ayer que el rey don Juan Carlos dio ayer su «bendición» al «matrimonio» contraído entre el presidente del Gobierno, Rodríguez Zapatero, y el líder de la oposición, Mariano Rajoy, para ir contra el nacionalismo y el Plan Ibarretxe. Atutxa hizo estas declaraciones tras la reunión que el monarca mantuvo con ambos dirigentes políticos en La Zarzuela.
Un encuentro que no ha sentado bien entre los Grupos Parlamentarios nacionalistas que, a pesar de que fuentes oficiales del Palacio de La Moncloa dieron ayer un carácter de normalidad a la reunión, alzaron voces y críticas de protesta.
Atutxa cree que la reunión entre Zapatero y Rajoy del pasado viernes fue quizá para «sellar otra nueva fórmula antinacionalista», un «matrimonio» que el Rey «ha bendecido» en la reunión que mantuvo el domingo con ambos. A su juicio, el PSOE «cede a las apetencias y a las presiones» del PP y, «forzado por los populares, hacen causa común, contraen ambas formaciones matrimonio, con sus máximos líderes a la cabeza, para ir frente a una iniciativa legítima y democrática que tuvo su respaldo de mayoría absoluta el pasado 30 de diciembre en el Parlamento vasco».Además, el presidente del Parlamento de Euskadi, se refirió a las declaraciones de Zapatero en San Sebastián en las que emplazaba el diálogo con la izquierda abertzale al fin de la violencia de ETA. «Yo resaltaría que el presidente del Gobierno está abierto a abrir cauces de diálogo y entendimiento con la izquierda abertzale en el momento en que dejen de sonar las pistolas y pregunto yo: ¿es que suenan las pistolas en el Gobierno vasco o en el Parlamento vasco?, ¿por qué no se está abierto también al diálogo y a la conversación, a la negociación con el Parlamento y el Gobierno vasco?».
En este sentido, Atutxa advirtió que la sociedad vasca no entenderá que no se llegue a negociar el Plan Ibarretxe y se le dé «el portazo en Madrid, no se le dice no a la reforma, sino a la mayoría absoluta el Parlamento vasco y al pueblo vasco». No obstante, precisó que se consultará sobre la propuesta siempre que ETA «haya parado definitivamente» en su actividad terrorista, pero, de no aprobarse el Plan en el Congreso, se preguntará al pueblo vasco «y se sabrá qué piensa».