Los precios de los carburantes en España volvieron a marcar ayer máximos históricos, con unos aumentos en sus costes medios por litro en lo que va de año que llegan al 20% en el caso del gasóleo de automoción y de hasta el 17% en el de las gasolinas, según los datos del Ministerio de Industria.
Así, el precio del gasóleo alcanza los 83,7 céntimos de euros por litro, es decir, 14,5 céntimos más que a principios de año, con un incremento en la factura del 20,9%. De forma similar, el precio medio del nuevo gasóleo ha pasado de los 73 céntimos de hace 10 meses a los 87 céntimos de ayer, lo que supone un alza del 19,1%.
Por su parte, el precio de la gasolina sin plomo de 95 octanos ha pasado de los 79,1 céntimos de euro por litro de la primera semana de enero a los 93 céntimos de ayer mismo, lo que supone un encarecimiento del 17,5% (13,9 céntimos).
En la misma línea, el coste de la nueva súper aditivada (gasolina 97) subió 14,1 céntimos, pasando de 0,861 euros a 1,002 euros por litro, es decir, un 16,3% más. El precio de la sin plomo de 98 octanos se situó ayer a 1,017 euros por litro, frente a los 0,881 euros de principios del año, lo que supone que el consumidor paga un 15,4% más.
El origen de estos incrementos en los precios de los carburantes está directamente relacionado con la evolución del crudo en los mercados internacionales, en los que su cotización está marcando continuos máximos.Precisamente, el gobernador del Banco de España, Jaime Caruana, afirmó ayer que el alza del petróleo puede afectar a la economía española. Así, señaló que que 2004 podría cerrarse con un crecimiento del PIB «ligeramente por debajo del 2,8 por ciento» y que en el 2005 «se podría acercar» al 3 por ciento, pero lo condicionó al mantenimiento del encarecimiento del crudo y a la recuperación económica de la UE.