Los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2005, presentados ayer a la Ejecutiva del PSOE por el vicepresidente segundo del Gobierno, Pedro Solbes, incrementarán el gasto social sin aumentar los impuestos directos ni indirectos y mantendrán el equilibrio de las cuentas.
Así lo subrayó el secretario de Organización socialista, José Blanco, en rueda de prensa tras la reunión de la Ejecutiva que analizó las cuentas públicas que el Consejo de Ministros aprobará este viernes y que responden a «las necesidades sentidas por la mayoría de los ciudadanos y al compromiso electoral del PSOE».
Aunque Solbes no presentó cifras concretas, sí anunció un aumento del 7,3% en el gasto educativo, un 33% en el Plan de Acceso a la Vivienda, un 25% en innovación y desarrollo, un 8,5% en infraestructuras, un 6,2% en seguridad ciudadana, y aumentos de entre el 5 y el 6,5% para las pensiones mínimas.Con estas cifras se aumentarán en 25.000 las becas para enseñanzas medias y universitarias, medio millón de personas se podrán beneficiar de ayudas públicas para acceder a la vivienda, o se crearán 7.700 nuevos puestos de Policía Nacional y Guardia Civil, 150 jueces y 100 fiscales, entre otras medidas.
La nota más característica de las cuentas públicas para el próximo año serán su objetivo de mantener la «estabilidad presupuestaria», según Blanco, sin que ello impida al Gobierno cumplir las promesas electorales del PSOE y los compromisos adquiridos con los ciudadanos.
Pero, sobre todo, destacó que serán unas cuentas «transparentes», con «precisión e información comprensible», y para ello prescindirán, como ya anunció el Gobierno, de la Ley de Acompañamiento, que «ha sido un instrumento claramente fraudulento» en manos del PP, según Blanco.