Los empresarios de grúas del País Vasco, donde se inició el conflicto hace un mes, se sumaron ayer al acuerdo alcanzado la pasada madrugada con las aseguradoras y desconvocaron el paro técnico, con lo que la retirada de los arcenes de los vehículos averiados o accidentados está ya en marcha en toda España.
La Asociación Vasca de Empresas de Auxilio en Carretera (Abeac) dio un «margen de confianza» de quince días a las compañías de seguros para negociar las tarifas, pero está dispuesta a convocar un nuevo paro si las conversaciones no son satisfactorias.
Las patronales del sector de grúas calculan que las carreteras estarán «limpias» el próximo lunes, excepto en el País Vasco, donde la operación llevará «una semana o diez días».
Gruistas y aseguradoras se reunirán el próximo martes, a las 11.00 horas, para constituir una mesa de negociación sectorial, de la que también quieren formar parte los consumidores.
La patronal del seguro, Unespa, cree que aún es pronto para saber si el acuerdo implicará una subida de las primas.
Los vehículos acumulados en las cunetas desde que se inició el paro - 400 en el País Vasco, 282 en Cataluña y 200 en el resto de España - empezaron a ser retirados la pasada madrugada, por lo que la Dirección General de Tráfico (DGT) procedió a levantar de forma progresiva el operativo especial que había dispuesto.
Los últimos en sumarse a la desconvocatoria del paro han sido los empresarios de grúas del País Vasco, que han decidido rubricar el acuerdo alcanzado en Madrid después de una asamblea de tres horas celebrada ayer en Bilbao.