La compra de una vivienda en España se ha convertido cada vez más en un imposible. De hecho muchos de los españoles que venían ahorrando en cuentas viviendas, que conllevan importantes beneficios fiscales, se han visto obligados a desistir de su ilusión de comprar un inmueble. Ello se debe a que no han podido encontrar en un periodo de cuatro años, que es el tiempo que tiene el beneficiario de estas deducciones fiscales para invertir sus ahorros, una vivienda a un precio que les permita su adquisición.
Así el Ministerio de Hacienda ingresó en el periodo establecido entre 2000 y 2002, un total de 758 millones de euros. Todo este dinero procede de las devoluciones de deducciones por cuenta vivienda.
Casi la mitad de las devoluciones correspondió a jóvenes entre 25 y 30 años que vieron frustrada su ilusión de conseguir su primer hogar, debido a los altos precios actuales de las viviendas.
La Agencia Tributaria ingresó en el periodo entre 2000 y 2002 un total de 758 millones de euros como consecuencia de las devoluciones de las deducciones practicadas en el IRPF por las aportaciones a las cuentas ahorro vivienda después de transcurridos cuatro años sin invertir en la adquisición o rehabilitación de la vivienda habitual.