La guerra de Irak ha encarecido el petróleo entre un 25 y un 30 por ciento, y, de hecho, si no se hubiera producido ese conflicto, el barril de crudo costaría ayer entre 29 y 30 dólares, según un estudio elaborado por el Grupo Parlamentario Socialista.
Esta es una de las principales conclusiones del informe «Análisis de las causas del aumento del precio del petróleo», presentado por el secretario general del Grupo Parlamentario Socialista, Diego López Garrido, y el secretario general adjunto, Francisco Fernández Marugán.
Según Fernández Marugán, esta situación afectará a la economía española, que reducirá «en algunas décimas» el crecimiento previsto por el Gobierno para este año (del 2,8 por ciento) que, al no ser «tan lineal como se esperaba», cerrará el ejercicio «entre el 2,6 y el 2,8 por ciento».
Según el citado informe, hace un año y medio, el mercado del petróleo estaba en equilibrio, con una oferta capaz de atender a toda la demanda.
Sin embargo, la crisis de Yukos (la productora soviética), la incertidumbre en torno a Venezuela y el resultado de su referéndum, el aumento de la demanda por parte de economías emergentes como India, China o Indonesia, y, sobre todo, la guerra de Irak, han «distorsionado» el mercado del petróleo y lo han encarecido hasta alcanzar máximos históricos.
El secretario general del Grupo Parlamentario Socialista, Diego López Garrido, recordó que entre marzo de 2002 y agosto de 2004, el precio del brent se ha duplicado, desde los 23 dólares por barril hasta los 44 dólares que se alcanzaron el viernes.