Las tropas españolas habrían regresado de Irak aunque la última resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas hubiera sido aprobada antes. Así lo dijo ayer el presiente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, tratando de zanjar la polémica creada tras la votación en la ONU.
Y en respuesta a las críticas del PP aseguró que el 18 de abril, cuando ordenó el regreso de las tropas, ya sabía «absolutamente todos los datos» con respecto a esta nueva resolución. Con este nuevo escenario, España «no va a mandar ni un soldado a Irak» aunque lo pida Bagdad, aunque apoyó la nueva resolución porque trata de «echar una mano» a las fuerzas ocupantes para mejorar una muy difícil situación. «Todo el camino realizado hasta ahora ha dejado heridas y huellas muy serias que ojalá se puedan recuperar», sentenció.
Esta última resolución de Naciones Unidas no habría servido para que las tropas españolas se quedaran en Irak. Rodríguez Zapatero aseguró que la única forma de modificar su decisión de retirada habría sido si la resolución hubiera estipulado que el general al frente del mando único de las tropas tuviera que ser nombrado directamente por el secretario general de Naciones Unidas, Koffi Annan.