Hicham Ahmidan, uno de los sospechosos de haber participado en el 11-M sobre los que pesa una orden de busca y captura, lleva más de un mes detenido en Tánger. Hicham, el cuarto miembro de la familia Ahmidan capturado por su presunta relación con los atentados de Madrid, podría haberlos financiado a través del tráfico de drogas y de coches.
Otros dos detenidos por el 11-M podrían ser confidentes de la policía y de la Guardia Civil. Este asunto provocó un agrio enfrentamiento entre Interior y el Cuerpo Nacional de Policía.
Las fuerzas de seguridad marroquíes detuvieron a Hicham Ahmidan el 25 de marzo en Tánger. El detenido se marchó a Marruecos días antes del 11-M. En España, Hicham compartía piso con su primo Hamid Ahmidan, en prisión desde el 29 de marzo. En esa vivienda, la policía encontró 50 kilos de hachís y 30 kilos de comprimidos, probablemente de sustancias psicotrópicas, así como documentación manipulada. El juez Del Olmo tramitó una orden de busca y captura internacional contra Hicham por su relación con el tráfico de hachís y de vehículos robados, así como con la falsificación de vehículos.
De hecho, estas actividades sirvieron para financiar la compra de los 200 kilos de Goma 2 Eco y los detonadores que se utilizaron en los atentados.
Hicham es el tercer miembro de la familia Ahmidan que ha sido arrestado.