El actual presidente del Santander Central Hispano, Emilio Botín, y los antiguos copresidente, José María Amusátegui, y vicepresidente y consejero delegado, Angel Corcóstegui, tienen 24 horas para depositar fianzas por valor equivalente a las jubilaciones que percibieron los dos últimos al dejar el banco (56 y 108 millones de euros, respectivamente) o la Audiencia Nacional embargará sus bienes.
Así lo estableció la juez Teresa Palacios en el auto dictado ayer en el que abre el juicio oral contra los tres por los delitos de apropiación indebida y administración desleal.
En el auto, la juez emplaza a los acusados para que, en el plazo de 24 horas, depositen fianza por el valor de las cantidades cobradas por Amusátegui y Corcóstegui, para asegurar las responsabilidades que puedan derivarse del proceso.Así, la magistrada solicita a Botín y a Amusátegui que depositen solidariamente los 56.095.790 euros en que se calcula la cuantía de las responsabilidades pecuniarias por lo cobrado por el segundo (43,75 millones de euros en concepto de 'bonus' a su gestión más las dos pensiones vitalicias por valor de 12.345.790 euros). Corcóstegui, solidariamente con Botín, deberá prestar fianza por los 108.182.178,78 euros que cobró al salir del entonces BSCH en febrero de 2002. Si esas fianzas no se presentan en el plazo fijado «se procederá al embargo de bienes en cantidad suficiente a cubrir dichas sumas», dice la resolución.