El Museo Público de la localidad vizcaína de Artea (Vizcaya) abrió ayer sus puertas al público, a pesar de que Javier Zumalde 'El Cabra', ex dirigente de ETA en los años sesenta, no recibió la autorización del Ayuntamiento del municipio vizcaíno para poder hacerlo. Por eso la Ertzaintza colocó unas maderas que taponaban la entrada al Museo, cosa que no intimidó a Zumalde, ya que éste optó por retirarlas.
La esposa de Zumalde y adjudicataria de la gestión del museo, Sabina Ibartua, justificó la apertura diciendo que con esta exposición pretenden que «la gente pueda ver y sacar sus propias conclusiones» sobre la trayectoria de su marido como dirigente de ETA durante la etapa franquista. La muestra contiene varios objetos relacionados con la organización terrorista de aquella época, entre los que se pueden ver armas simuladas, dibujos de explosivos y un zulo guerrillero.
El ex dirigente de ETA, que no está dispuesto a renunciar a la exposición sobre la banda terrorista que promociona su libro, señaló que el Gobierno vasco sabían desde hace mucho tiempo de la existencia de esta colección de artefactos que sirvieron a la organización terrorista durante el franquismo.