El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, anunció ayer que ha ordenado el regreso de las tropas españolas que se encuentran en Irak «en el menor tiempo y con la mayor seguridad posibles» ya que no es previsible que la ONU apruebe una resolución que se ajuste a las condiciones planteadas.
Rodríguez Zapatero hizo este anuncio en una declaración institucional en el Palacio de la Moncloa en la que estuvo acompañado por la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega; el ministro de Defensa, José Bono; y el jefe del Estado Mayor de la Defensa, Rafael Moreno Barberá.
Zapatero explicó que hace más de un año formuló un compromiso público de que, en caso de ser presidente del Gobierno, ordenaría el regreso de los militares si la ONU no se hacía cargo de la situación política y militar en Irak. Añadió que tanto las manifestaciones públicas de los principales actores implicados en el conflicto como los contactos que ha mantenido Bono el último mes a instancias suyas, «no aportan indicios que permitan prever una variación sustancial en la situación política y militar existente en Irak en los plazos previstos y en el sentido reclamado por el pueblo español».De ahí la decisión de que regresen las tropas españolas, lo que, dijo, responde «antes que nada» a su voluntad de «hacer honor» a su palabra. «El Gobierno, animado por las más hondas convicciones democráticas, no quiere, no puede y no va a actuar en contra ni de espaldas a la voluntad de los españoles», aseguró Zapatero.
Además, explicó que la decisión de retirada de las tropas responde igualmente al propósito de contribuir «a la lucha que libra la comunidad de naciones contra el terrorismo desde el más estricto respeto a la legalidad internacional». El presidente del Gobierno garantizó que su Ejecutivo seguirá apoyando firmemente «la estabilidad, la democratización, la integridad territorial y la reconstrucción de Irak».Y de acuerdo con ello, aseguró que promoverá cuantas acciones de Naciones Unidas y de la UE «ofrezcan un marco de cooperación internacional que contribuya eficazmente a que los iraquíes recobren su soberanía y puedan organizar libre y democráticamente sus elecciones para construir su propio futuro en paz, independencia y seguridad». Añadió que el Gobierno mantendrá la condición de España como aliado fiel de sus socios y cumplirá sus compromisos internacionales.