EFE/EUROPA PRESS-MADRID
El Comité Federal, máximo órgano de dirección del partido entre
congresos, se reunió ayer con carácter extraordinario para hacer un
análisis de los resultados de las elecciones generales. Los
socialistas coincidieron en respetar todas las interpretaciones que
sobre la jornada electoral se han hecho, menos una: aquella que
describe a un pueblo español «acobardado» frente al terrorismo, una
opinión que a Rodríguez Zapatero le resulta «sencillamente
indecente».
En el análisis sobre las elecciones, los dirigentes socialistas consideraron que la derecha no ha asumido los resultados y opinaron que la victoria hay que administrarla con tolerancia, prudencia y generosidad. La jornada comenzó con un minuto de silencio en recuerdo a las víctimas de los atentados del 11 de marzo y con la intervención de Rodríguez Zapatero, quien afirmó que, con su victoria, comienza «el futuro» para España y una etapa con un «nuevo talante».
En su discurso, Rodríguez Zapatero pidió a los socialistas «humildad y austeridad» en su acción de Gobierno, para la que deberán contar con los ciudadanos. «Ha comenzado el futuro de la España social, que será el resultado de nuestro proyecto electoral, del diálogo, la participación y el consenso», indicó el líder del PSOE, quien detalló que, entre otros, comienza el futuro para otra política exterior, el avance social, la educación pública, la cultura, la España autonómica y el empleo.Aseguró que dialogará «lealmente» para la «actualización estatutaria de aquellas comunidades que lo precisen, dentro del marco constitucional y el respeto escrupuloso de los derechos de todos los españoles», dijo el líder socialista.
Zapatero afirmó que el pasado 14 de marzo, día de las elecciones legislativas, ganó la democracia, así como que respeta todas las interpretaciones sobre los resultados excepto la que describe «a un pueblo acobardado ante el terrorismo», versión que calificó de «indecente».