El juez de la Audiencia Nacional Juan del Olmo ordenó ayer el ingreso en prisión incondicional, por un delito de colaboración con organización terrorista, de los marroquíes Rafá Zuher y Naima Oulad Akcha, detenidos el pasado fin de semana en Madrid por su presunta relación con los atentados del 11-M.
Según informaron fuentes jurídicas, durante su declaración, que en el caso de Zuher duró una hora y media mientras que la de Oulad -la única mujer arrestada hasta el momento- se prolongó por espacio de tres horas debido a que precisó de intérprete, ambos detenidos negaron haber tenido ningún tipo de intervención en la preparación de la masacre.
Además, los dos condenaron expresamente los atentados, rechazaron el terrorismo y aseguraron que nunca han tenido vinculación con Al Qaeda o cualquier otro grupo islámico radical.En el auto de prisión, el magistrado dispuso que Zuher y Oulad, que prestaron declaración asistidos por abogados de oficio, permanezcan incomunicados durante los próximos cinco días.
Naima Oulad compareció ante el juez vestida con un abrigo y con la cabeza cubierta con un pañuelo, mientras que Rafá Zuher llevaba pantalón y camiseta de manga corta oscuros. Con estos dos, son ya once los detenidos en relación con los atentados del pasado día 11 que han ingresado en prisión por orden de Del Olmo, aunque sólo a cinco de ellos se les ha imputado por su participación en la matanza.
Se trata de los marroquíes Jamal Zougam, Mohamed Chaoui, Mohamed Bakali y Abderrahim Zbakh y del español José Manuel Suárez Trashorras, acusados de 190 asesinatos terroristas consumados, de otros 1.430 en grado de tentativa y de cuatro delitos de estragos terroristas.