El lehendakari, Juan José Ibarretxe, ha tardado sólo dos días en recoger el guante de diálogo lanzado por el próximo presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y ha pedido que se abra una nueva etapa «sin condiciones y con respeto».
Sin embargo, el PSOE mantiene todavía que el Plan Ibarretxe no tiene «ninguna posibilidad» de salir adelante en el Congreso de los Diputados, aunque garantiza la cooperación institucional entre el Gobierno central y el Ejecutivo vasco.
«Sin condiciones y con respeto». Ese es el diálogo que propuso Ibarretxe, satisfecho de que se haya recuperado esa palabra en la vida política española después de que haya sido «despreciada y demonizada en los últimos tiempos».
De hecho, Rodríguez Zapatero e Ibarretxe ya han mantenido una primera conversación que servirá para allanar el camino entre el Gobierno central y el vasco, cuyas relaciones han pasado por momentos muy difíciles en la última legislatura del PP.Dijo que respeta pero no comparte las ideas de Rodríguez Zapatero y le pidió que diga él «lo mismo respecto al lehendakari», porque sería «un buen punto de partida». «Tenemos una oportunidad para dialogar sin condiciones, respetándonos unos a otros», dijo, poniendo encima de la mesa las ideas de todos para «conseguir un modelo de relación de convivencia entre Euskadi y España». «Siempre hemos tenido las puertas abiertas para hablar con el Gobierno español», añadió, y sólo puso como condición que «jamás se me pida que deje al lado mis ideas para dialogar».