El Indice de Precios de Consumo (IPC) bajó el 0,7% por ciento en enero y situó la tasa de inflación de los últimos doce meses en el 2,3 por ciento, tres décimas menos que un mes antes, y la más baja desde julio de 1999, informó el Instituto Nacional de Estadística (INE). La inflación subyacente -excluye la variación de los precios de los alimentos frescos y de la energía- descendió en enero el uno por ciento, con lo que la tasa interanual también se situó en el 2,3 por ciento, dos décimas menos que en diciembre.
Tras conocer estos datos, el ministro de Economía, Rodrigo Rato, aseguró que los datos de enero permiten que se «afiance la recuperación de la economía española y su capacidad de competir con la europea», al tiempo que mantiene un crecimiento económico mayor que la media.
El grupo que más contribuyó en enero al descenso de la inflación fue el centrado en el vestido y calzado, con un abaratamiento del 11 por ciento debido a las rebajas, seguido de ocio y cultura (1,4 por ciento) por la disminución de los paquetes turísticos tras finalizar las navidades; menaje (0,6 por ciento) y comunicaciones (0,1 por ciento).Por el contrario, los principales encarecimientos los registraron otros bienes y servicios (1,8 por ciento), vivienda y transporte (0,7 por ciento), hoteles, cafés y restaurantes (0,6 por ciento), alimentos y bebidas no alcohólicas (0,5 por ciento), medicina y enseñanza (0, por ciento) y bebidas alcohólicas y tabaco (0,1 por ciento).
Los alimentos frescos, los productos energéticos y los servicios sin alquiler subieron el 0,6 por ciento, y los carburantes y combustibles el 0,3 por ciento, mientras que los bienes industriales se abarataron el 2,6 por ciento.