El secretario general adjunto de CiU, Pere Macias, anunció ayer que la federación no apoyaría a José Luis Rodríguez Zapatero en el Congreso de los Diputados tras las elecciones generales, siempre que sumen una mayoría frente al PP, si Pasqual Maragall «arrebata» a Artur Mas la presidencia de la Generalitat tras pactar con ERC.
Macias, uno de los dos negociadores de CiU en los pactos postelectorales en Catalunya, junto a Josep Antoni Duran i Lleida, advierte que «un acto del socialismo en el que quien legítimamente ha ganado las elecciones en Catalunya no sea presidente, sería de una beligerancia tan clara que nos haría imposible prestar ningún apoyo futuro a Zapatero».
En este sentido, Macias deja claro que si el PSOE pretende recabar algún apoyo de CiU frente al PP, «la mejor manera no es arrebatándonos aquello que el pueblo de Catalunya nos ha dado» haciendo una coalición con ERC e ICV. «Nuestra prioridad como fuerza nacionalista es Catalunya y todo lo que hacemos lo hacemos en función de poder gobernar, y no para tener más o menos influencia», insiste Pere Macias.
Por su parte, el presidente de la Generalitat en funciones, Jordi Pujol, ve más factible y preferible un «pacto a tres» entre CiU, ERC y PSC porque facilitaría el proceso de nuevo Estatut en Catalunya y, además, reduciría la tensión política catalana.