OTR/PRESS-MADRID/PARÍS
Los dos presuntos etarras detenidos el domingo cerca de la
localidad gala de Agen, Igor Letona y Mikel Uzkudun, servían de
enlace con otros subaparatos de la banda terrorista ETA para
suministrar material y componentes electrónicos destinados a la
elaboración de artefactos explosivos. Además, las cinco pistolas,
el subfusil y el fusil de asalto que la policía francesa les
intervino proceden del mercado negro y son copias de marcas
conocidas.
El ministro del Interior, Àngel Acebes, explicó que el cometido de Letona y Uzkudun era facilitar material a los comandos de ETA para que éstos fabricasen bombas.
Acebes dijo que el origen de la operación antiterrorista en Francia radica en las investigaciones llevadas a cabo tras la detención en Cahors del denominado «núcleo logístico de ETA», que arrojó un balance de tres arrestos, entre ellos un ciudadano francés, en julio pasado. Además, confirmó la identificación de los dos detenidos, Igor Letona, de 32 años de edad, y Mikel Uzkudum, de 23 años.
También se refirió al material que se incautaron los agentes galos en el registro practicado en la vivienda que albergaba a los presuntos terroristas, además de armas largas y cortas, componentes electrónicos para la fabricación de artefactos explosivos, una troqueladora y placas de matrículas sustraídas en Francia, así como abundante documentación interna de la banda terrorista.