José Luis Rodríguez Zapatero ya trabaja pensando en el objetivo de arrebatar el Gobierno al PP, de convertirse en el sucesor de José María Aznar en la Moncloa y de vencer a Mariano Rajoy en marzo. Por ello, dio ayer por finalizada la etapa de «oposición útil» para dar paso a nuevo estadio de «alternativa y cambio responsable».
El líder socialista, ante los responsables de realizar el programa electoral del partido, se comprometió a acabar con las políticas «autoritarias, antisociales y antiguas», pero también a respetar todo aquello que funcione, aunque provenga del PP.
El secretario general del PSOE intervino ayer ante los responsables de su partido que están trabajando, bajo la supervisión de Jesús Caldera, en la elaboración del programa electoral. Ante ellos recordó que, desde que es secretario general, el partido ha desarrollado una oposición útil por responsabilidad, para ser útil al interés nacional.
Fruto de esta oposición, según recordó Rodríguez Zapatero, fueron acuerdos de estado como el Antiterrorista o el de la Justicia, «que el Gobierno incumple de manera manifiesta», y ofertas como en el caso de inmigración, que el Ejecutivo ha rechazado «con soberbia». El líder socialista lamentó que no haya tenido la misma altura de miras ni cuando estaba en la oposición ni cuando estaba en el Gobierno.