EFE-AIZCOÀIN (NAVARRA)
El acuartelamiento del Ejército de Tierra de Aizoáin fue objeto
ayer de un atentado frustrado con dos granadas, una de las cuales
impactó en un edificio militar sin hacer explosión y la otra no
llegó a salir disparada, y con una bomba trampa colocada en la
furgoneta utilizada para el lanzamiento de estos artefactos.
Hacia las 13,10 horas, una granada lanzada desde una furgoneta aparcada en la falda del monte de San Cristóbal impactó contra el tejado de uno de los edificios del acuartelamiento de Aizóain, localidad situada a unos seis kilómetros de Pamplona, y cayó al suelo del patio del recinto militar, produciendo escasos daños.
Tras ser trasladada fuera de la zona edificada del cuartel, agentes del Grupo de Especialistas en Desactivación de Explosivos (GEDEX) de la Guardia Civil realizaron una explosión controlada de la granada a las 15,00 horas,Posteriormente, los agentes del GEDEX localizaban una furgoneta de color blanco de la marca Peugeot, con las placas de matrícula dobladas, desde la que se había realizado el lanzamiento de la granada.
En las proximidades de esta furgoneta, que estaba situada en un camino vecinal de Aizoaín, a unos 35 metros de la antigua carretera nacional, la 240-A, se localizó otra granada de similares características que al parecer había fallado en su lanzamiento y que a las 15,45 horas fue desactivada.
En una inspección ocular del vehículo, los agentes detectaron la existencia de una bomba trampa, que también fue desactivada tras una detonación controlada.