El Consejo de Ministros aprobó ayer el Proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2004, elaborado sobre una previsión de aumento del PIB del tres por ciento y la creación de 299.700 nuevos puestos de trabajo. El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, aseguró que el objetivo fundamental es avanzar hacia el pleno empleo, al tiempo que se atienden las demandas prioritarias de los ciudadanos. El presupuesto vuelve a establecer el equilibrio entre ingresos y gastos y la congelación, por segundo año consecutivo, de los impuestos especiales, tras comprobar que con menos impuestos «se vive mejor y se crean más puestos de trabajo» y que es compatible con el incremento de la recaudación.
El Ejecutivo calcula que la tasa de desempleo se reducirá tres décimas en 2004, hasta el once por ciento de la población activa. Según las cuentas presentadas por Montoro, el equilibrio será resultado de un déficit del Estado y sus organismos autónomos del 0,4 por ciento del PIB y un superávit equivalente de la Seguridad Social.
La recaudación tributaria supondrá 97.923 millones de euros, con un aumento del 2,7 por ciento respecto al 2003 y del 6,9 por ciento si se incluye lo recibido por las comunidades autónomas y ayuntamientos.