El consenso fue anunciado en el Congreso por el portavoz del PSOE en la Cámara Baja, Jesús Caldera, y por la secretaria de Asuntos Sociales del PP, Àngeles Muñoz, quienes coincidieron en subrayar la trascendencia del acuerdo, que permitirá que la nueva Ley de Extranjería entre en vigor en enero. A juicio de Caldera, la modificación hará «más eficaz» esta norma y acabará con la «marea de inmigración ilegal que asola España».
Por parte del PP, Àngeles Muñoz destacó que las enmiendas del PSOE «enriquecen» el texto, sin modificar el «espíritu» de la reforma, que pretende luchar mejor contra las mafias delictivas, favorecer los flujos migratorios legales y simplificar la tramitación de los permisos. De las 24 enmiendas que había formulado el PSOE, el PP aceptará 20, y las otras cuatro parcialmente, a través de enmiendas transaccionales; con la aportación de otras enmiendas de CC, la ponencia llevará un único texto a la Comisión Constitucional.
Consuelo Rumí destacó que en virtud de las enmiendas del PSOE se van a implantar unos nuevos modelos de visado temporal de tres meses para que los inmigrantes puedan buscar trabajo en España durante ese período en condiciones de regularidad, y continuar legalmente en el país si consiguen un empleo.