El Tribunal Superior de Justicia del País Vasco achacó su decisión de no prohibir la manifestación del pasado domingo en San Sebastián a que el Departamento de Interior no aportó «prueba alguna» que lo permitiera. Según los jueces, Interior incurrió en «una notable ligereza» al no alegar riesgo de desorden público en la marcha que recorrió las calles de la capital guipuzcoana y que acabó con la quema de una bandera española. Ayer el Departamento que dirige Javier Balza prohibió una concentración que debía tener lugar el viernes, por considerar que detrás de la convocatoria está Batasuna.
La Sala de Vacaciones del Tribunal Superior vasco explica en la sentencia hecha pública ayer que el lema de la manifestación del pasado domingo, «No al Apartheid. Autodeterminación», es susceptible de defensa democrática. Y aunque recuerda la prohibición de que Batasuna promueva actos, sus miembros «conservan sus derechos ciudadanos, entre los que está el de convocar manifestaciones».
Consideran los jueces vascos que debe hacer una «segura acreditación para suspender un derecho fundamental, y considera que el Departamento de Interior del Gobierno vasco «incurrió en una notable ligereza» al no alegar que podía haber riesgo de desórdenes públicos. De hecho, recuerda el Tribunal que el Ejecutivo no suspendió la manifestación en el plazo establecido por la Ley, sino cuando cargos de Batasuna la respaldaron posterior y públicamente.