La Sección Primera de lo Penal de la Audiencia Nacional ha condenado a 790 años y siete meses de prisión al ex dirigente etarra Santiago Arróspide Sarasola, alias «Santi Potros», y a Rafael Caride Simón, como inductor y autor material respectivamente del atentado que ETA cometió el 19 de junio de 1987 en el Hipercor de Barcelona, la acción más sangrienta de la banda. La sentencia reconoce por primera vez como víctima a la hija de una cajera del citado centro que nació sorda como consecuencia de la explosión.
Este atentado de ETA provocó la muerte de 21 personas y heridas a otras 44. Así, se les ha condenado por el mismo número de asesinatos y lesiones de distinta gravedad, así como un delito de estragos. Además de la condena de prisión, la sentencia les condena a indemnizar, solidariamente con los ya condenados Domingo Troitiño y Josega Ernaga, con 150.253,02 euros a los familiares de los fallecidos y con cantidades que oscilan entre los 300,51 y los 94.358,9 euros a los heridos.
Entre esos heridos figura, por primera vez, la de la menor Jessica, que nació después del atentado con hipoacusia severa bilateral congénita, susceptible de rehabilitación sólo parcial. El Tribunal le concede 70.000 euros por considerar que su sordera se debe al efecto de la bomba. Su madre era cajera del supermercado y estaba embarazada de tres meses en el momento de la explosión.