El ministro del Interior, Angel Acebes, expresó ayer su voluntad de consensuar la nueva reforma, la cuarta, de la Ley de Extranjería con todas las fuerzas políticas, aunque los grupos de la oposición coincidieron en que su redacción ha adolecido de diálogo y refleja «el fracaso» de las políticas de inmigración del gobierno. Pese a todo, el PSOE dejó abierta la puerta al consenso.
Tras más de tres horas de debate, el Pleno del Congreso rechazó las enmiendas a la totalidad al texto presentadas por IU y los grupos del Grupo Mixto BNG, EA, ERC, ICV y Chunta Aragonesista, cuyos portavoces acusaron al Ejecutivo de evitar las consultas con los agentes sociales y de intentar aprobarlo con «muchas prisas».
La enmiendas del Grupo Mixto fueron rechazadas por 145 votos en contra (PP y CC), diez a favor y 81 abstenciones (PSOE, PNV y CiU), y la de IU por 144 en contra, once a favor y 81 abstenciones.