La organización del Tour de Francia revocará el acuerdo firmado con Batasuna para promocionar el euskera, tal y como a lo largo de la jornada se solicitó desde el Gobierno y desde el PSOE. Sin embargo, el nacionalismo vasco considera exagerada la reacción del Ejecutivo e incluso el consejero de Justicia del Ejecutivo autonómico, Joseba Azkarraga acusó al gabinete Aznar de perseguir «no sólo las ideas, sino también la cultura y los idiomas».
Jean María Leblanc, director del Tour de Francia, revocará el acuerdo con Batasuna. «Evidentemente estamos listos para realizar un gesto de apaciguamiento», dijo, ya que «la conmoción en España sobrepasa completamente las intenciones del Tour». En todo caso, aseguró que la voluntad de la ronda gala fue sólo la de «escuchar a dos asociaciones para que la lengua vasca estuviese representada en Bayona». Así respondió el Tour a las exigencias que Gobierno y PSOE habían hecho durante toda la jornada. El vicepresidente primero, Mariano Rajoy, se mostró convencido de que el acuerdo firmado entre el Tour y Batasuna se debe al desconocimiento y confió en su rápida rectificación. «No es de recibo que se llegue a un acuerdo con una organización que no sólo es ilegal en España, sino que además figura en la lista de organizaciones terroristas de la Unión Europea», dijo.
Leblanc, director del Tour, ya había explicado que desconocían que detrás de la petición para promocionar el euskera en la ronda gala estuviera una organización ilegal. Por su parte, el dirigente de la ilegalizada Batasuna Joseba Àlvarez aseguró ayer que Leblanc «sabe muy bien qué es Batasuna», por lo que negó que el rector de la ronda haya sido engañado en el acuerdo alcanzado para utilizar el euskera en una etapa de la prueba.