El presidente de la Ejecutiva del PNV (EBB), Xabier Arzalluz, advirtió ayer en una conferencia de prensa en Bilbao de que «si arrastran por el suelo» la propuesta del lehendakari, Juan José Ibarretxe, «igual es el último plan que se presenta en este país que no es independentista».
Arzalluz emplazó al presidente del Gobierno, José María Aznar, a no «estropear» un plan «serio» y «sensato» que propone una «nueva forma de presencia de los vascos en el Estado español, no en un estado vasco, pero que sea voluntaria, en igualdad de condiciones y con seguridad».
El presidente del EBB comparó la «reforma del Estatuto» propuesta por Ibarretxe con la situación actual de los laender alemanes y recalcó que «en ningún momento se habla de soberanía o de independencia». En su opinión, esta propuesta es «necesaria» porque los gobiernos centrales han tratado al Estatuto vasco como un «trapo de cocina» y «no hay seguridad jurídica» para el autogobierno, de lo que puso como ejemplo las invocaciones al artículo 155 de la Constitución para suspender la autonomía de Euskadi.