De acuerdo con el auto de inadmisión del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, contra el que el PSOE interpondrá recurso de súplica, la ausencia premeditada de los dos parlamentarios el día de la sesión constitutiva de la Cámara madrileña «no pasa de ser un hecho sin trascendencia penal apreciable en este momento, de carácter exclusivamente político o inocuo desde el punto de vista criminal», pese a todo envía la querella a la Fiscalía Anticorrupción para que investigue.
Añade que «no se menciona en la querella, con palmaria omisión, la existencia de la dádiva o promesa propia del delito de cohecho» y explica que la descripción de la «presunta trama» relacionada con la actuación de los parlamentarios regionales no admite en este momento «y a la vista de tal soporte y de las alegaciones formuladas tan siquiera la simple conceptuación de sospecha fundada».
La Sala argumenta que la descripción de la presunta trama «no supera la fase de conjeturas», pero uno de los magistrados emitió un voto particular en el que considera que «el cúmulo de casualidades tiene un límite» y pide que se tome declaración a los querellados.