El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón decretó ayer prisión incondicional par cinco de los seis responsables de Udalbiltza Kursaal, la Asamblea de Electos de Batasuna. Les imputa un delito de pertenencia a banda armada por participar en un proyecto dependiente de ETA financiado con presupuestos de ayuntamientos gobernados por Batasuna. Garzón sólo ha dejado en libertad bajo fianza de 50.000 euros a uno de los detenidos, el alcalde de la localidad guipuzcoana de Oiarzun, Xabier Iragorri Gamio.
El alcalde de Ondarroa (Vizcaya), Loren Arkotza; los concejales de las localidades guipuzcoanas de Lezo, Imanol Esnaola, y Urretxu, Miren Josu Aramburu; el histórico dirigente de KAS Xabier Alegría y HJoseba Mikel Garmanedia. Estos dos últimos ya cumplían prisión provisional por otras causas pendientes de investigación por el juez.
Sólo quedó en libertad bajo fianza de 50.000 euros Xabier Iragorri Gamio, alcalde del municipio guipuzcoano de Oiarzun, quien deberá comparecer semanalmente en el juzgado al ser imputado de un delito de colaboración. Los seis responsables de Udalbiltza se negaron a declarar ante Garzón, limitándose a afirmar que no tenían ninguna relación con ETA.En su auto, Garzón tacha a Udalbiltza Kursaal como «una plataforma bajo el control director y exclusivo de ETA a través de Ekin (brazo político de la organización) y del suspendido e ilegalizado partido político Batasuna», dirigida a constituir un contrapoder al Estado Español.
Arkotxa, según el auto de Garzón, es el principal responsable y cabeza visible de la entidad. A Esnaola y Aramburu les imputa responsabilidades en la Asamblea derivadas jerárquicamente del coordinado de la entidad, Xabier Alegría, imputado también en el 'caso Ekin' y encarcelado tras el cierre del diario 'Euskaldunon Egunkaria'.