GEMMA ROBLES-MADRID/LOGROÑO
El presidente del Gobierno y del Partido Popular, José María Aznar,
aprovechó el mitin que dio anoche en Logroño ante más de 4.000
personas para lanzar un mensaje a los nacionalistas vascos, después
de que se haya conocido un nuevo comunicado de ETA, que apoya el
'Plan Ibarretxe' y anuncia novedades en próximos días: «Las reglas
se necesitan, las normas se cumplen, y con los terroristas, no se
pacta. Que nadie se equivoque, advirtió entre los aplausos del
auditorio, después de sentenciar que el nacionalismo busca ya «otro
pacto de Estella».
Aznar, en el Polideportivo de la capital riojana, dijo que los mismos que pactaron hace años con la banda terrorista en el marco de Estella, que supuso una tregua de ETA, están ahora «dando vueltas a esos mismos acuerdos». «Andan pactando, acordando otro pacto de Estella, que son pactos de imposición y exclusión» dijo, para después añadir que no se respetan reglas «sencillas» de cumplir como son «respetar las normas y no pactar con los que asesinan».
En este sentido, por cuarto día consecutivo, destacó la relevancia de que Batasuna no pueda presentarse a las elecciones, ya que eso significa que «los que matan» no cobrarán «dinero público».
Horas antes, Aznar se comprometió a intervenir «personalmente» para que su sucesor incorpore a discapacitados en las listas que presente en las elecciones generales de 2004, respondiendo así a una propuesta que le hizo el presidente del Comité Español de Representantes de Minusválidos (CERMI), Mario García, que pidió presencia de este colectivo en las candidaturas que optan a los gobiernos autonómicos y municipales el próximo 25 de mayo.«Por cierto, querido Mario, por mi parte caminos abiertos a la representación. Las listas autonómicas y municipales ya están presentadas, pero estoy seguro de que habrá una buena presencia de personas con discapacidad en la lista para las elecciones generales, ya me ocuparé yo de que la haya -garantizó-. Por el momento, mi plaza de diputado, va a estar vacante».
Aznar, que presumió de ser el primer jefe del Ejecutivo que ha recibido en La Moncloa a la CERMI, afirmó que su gobierno quiere una España «sin barreras», donde todos, incluidos los discapacitados, puedan aportar algo a la sociedad. En este contexto, anunció que en el próximo Consejo de Ministros aprobará la nueva Ley de Igualdad de Oportunidades y No Discriminación de Personas Discapacitadas (LISMI), que sustituirá a la anterior, todavía vigente.