El Govern ha constituido un gabinete de crisis, formado por seis departamentos, para evaluar los efectos que tendrá la guerra en Irak. El president del Ejecutivo, Francesc Antich, reunirá hoy mismo en el Consolat de Mar una comisión que analizará las consecuencias que tendrá el conflicto en Balears. Además de Antich, forman parte del gabinete de crisis el vicepresident y conseller d'Economia, Pere Sampol; el conseller d'Hisenda, Joan Mesquida; el titular de Turisme, Celestí Alomar; el conseller d'Interior, Josep Maria Costa, y el titular de la Conselleria de Treball, Miquel Rosselló.
Dicha comisión prestará especial atención a los daños que pueda que pueda padecer la población civil de Irak, y estudiará posibles vías de ayuda humanitaria para este país. Además, los integrantes del gabinete de crisis estudiarán los posibles efectos negativos que la guerra puede tener para los distintos sectores económicos de Balears y preparará futuras medidas de colaboración humanitaria con la población civil de Irak. En un comunicado hecho público ayer, el Govern volvió a posicionarse en contra de la guerra porque «es la máxima expresión de violencia y el camino menos deseable para solucionar conflictos internacionales». El Ejecutivo recuerda que tanto Estados Unidos como España han decidido actuar al margen del derecho internacional, y en concreto del Consejo de Seguridad de la ONU, y de la inmensa mayoría de la población.