EFE-SAN SEBASTIÀN
El parlamentario y candidato del PNV a diputado general de
Guipúzcoa, Joxe Joan González de Txabarri; el portavoz del Gobierno
vasco, Josu Jon Imaz; el portavoz del PNV, Joseba Egibar; la
secretaria de la ejecutiva de este partido, Josune Ariztondo, y su
presidente en Guipúzcoa, Juan María Juaristi, asistieron a un mitin
en el que se dieron cita, además, candidatos nacionalistas a
diversas alcaldías vascas.
Román Sudupe opinó que el cierre del diario Egunkaria, el no reconocimiento de la presunción de inocencia de los detenidos en esta operación y la aprobación de la Ley de Partidos son retrocesos que «pagará caro la democracia».
El candidato a la alcaldía donostiarra por la coalición PNV-EA indicó que, en Euskadi, frente a quienes, a su juicio, impulsan retrocesos democráticos «muy graves» se encuentran «los asesinatos de ETA», organización que «no pretende liberar a este país, sino imponer sus tesis y sus criterios».Tras calificar a ETA de «fascista», señaló que «no se pueden tolerar» las dificultades que atraviesan PP y PSE/EE para confeccionar sus listas electorales debido a la presión terrorista, por lo que trasladó su «calor y aliento» a socialistas y populares.
Se mostró, por otro lado, defensor «a pies juntillas» del plan de transición hacia un nuevo marco jurídico impulsado por el lehendakari, documento sobre el que opinó que es para «formar con España una articulación política» para erigir una «unidad política común».
Consideró que este proyecto está «abierto» al debate y que su objetivo es la paz, el diálogo, la búsqueda del entendimiento, primero dentro de la sociedad vasca y, a continuación, con España.
El parlamentario en las Cortes y candidato del PNV a diputado general de Guipúzcoa, Joxe Joan González de Txabarri, criticó que ni PP ni PSE/EE presenten alternativas al plan del lehendakari y abogó por construir un territorio guipuzcoano diseñado como una «ciudad abierta».
El presidente del Gipuzku Buru Batzat del PNV, Juan Mari Juaristi, afirmó, por su parte, que la desaparición de ETA se vislumbra en breve, así como la celebración de una consulta al pueblo vasco sobre el plan Ibarretxe en 2004.