El Parlament dijo ayer «no a la guerra» en un intenso debate en el que el PP votó en contra de la proposición no de ley presentada por ePacte. La propuesta aprobada con los votos de las fuerzas progresistas y con la oposición de todos los diputados del PP, incluído el propio Pere Rotger, plantea un «rechazo a cualquier tipo de acción violenta entre los pueblos». El PP propuso un texto alternativo de condena al régimen de Sadam que no fue aceptado por los grupos de la mayoría. Los populares, a través de Joan Huguet, pretendían que el Parlament se manifestase de forma clara y rotunda en contra del «régimen dictatorial de Sadam Husein».
«Nosotros no queremos participar en este viaje. Ni nosotros ni la mayoría de los países europeos», subrayó el socialista Andreu Crespí. Maria Antònia Vadell, del PSM, pidió al Estado español que «nos escuche» y añadió que «justificar una acción tan grave como la guerra es pervertir el espíritu de la democracia».
«Estamos hablando de un régimen genocida y totalitario», insistió Huguet, quien recordó que China, Francia y Rusia son «los principales beneficiarios del petróleo que produce Irak». «Todos estamos en contra de la guerra, pero hay alguien que la puede evitar ¿Se está desarmando Sadam Husein?», preguntó el diputado del PP.