Ayuntamientos de Batasuna están destinando miles de euros a grupos de su entorno, como la organización Senideak, de apoyo a los presos de ETA, a falta de cinco meses de las elecciones municipales. A la vez, aceleran los trámites para aprobar los Presupestos locales de 2003 en aquellos lugares donde están pendientes antes de la posible llegada de otro partido a la gestión municipal.
Según las fuentes consultadas en varios consistorios vascos, los gobiernos municipales de la formación abertzale que cuentan con mayoría o tienen capacidad para aprobar las cuentas públicas han aprobado ya partidas destinadas a estos colectivos. Así, la Udalbiltza de Batasuna recibirá 58.000 euros; Senideak, 12.000; la fiesta de la independencia, 2.500, y otros colectivos, como Eudima, Itoitz y Euma sumarán más de 10.000.
El presidente del grupo parlamentario del PP en el Parlamento vasco, Jaime Mayor Oreja, dijo ayer que, «probablemente, el Gobierno va a recurrir los Presupuestos, pero vamos a esperar la sentencia del Tribunal Constitucional respecto de la constitucionalidad de los anteriores».
En declaraciones a Antena 3, reconoció que el día que llegó tarde a la votación de los Presupuestos vascos para este año «fue el peor día de mi vida política» y añadió que «no hay cosa peor que sentirse responsable de una cosa que uno ha hecho mal». Respecto a su papel en la sucesión de Aznar, Mayor Oreja insistió en que «no tengo ni idea de lo que va a ser de mi vida política en los próximos años». Reiteró que «lo único que puede decir es que estaré siempre a disposición de mis compañeros del PP del País Vasco», por eso «yo no descarto, ni descartaré nunca, ninguna candidatura en ningún sitio».
«Los acontecimientos -agregó-, en un 90 por ciento de los casos, van a ir decantando naturalmente el perfil del sucesor y no va a haber posición contrapuesta entre lo que piense Aznar y el Comité Ejecutivo», y auguró que, «al final, habrá una clara posición de todo el mundo alrededor de un candidato».
Sobre el País Vasco, comentó que «el miedo es hoy el hecho diferencial vasco y la mentira histórica es el problema vasco».
La Sección Primera de lo Penal de la Audiencia Nacional ha condenado al ex dirigente de ETA José Luis Urrusolo Sistiaga a 12 años de prisión, por el secuestro del financiero Diego Prado y Colón de Carvajal, perpetrado en 1983. Además, el etarra tendrá que indemnizarle con 12.000 euros por los daños morales causados por la acción terrorista. Durante el juicio, Urrusolo se negó a declarar sobre su implicación, pero la sentencia señala que Tapia Irujo y Venancio Sebastián Horcajo le implicaron.