El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón dejó ayer en libertad bajo fianza de 12.000 euros a dieciocho de los diecinueve dirigentes de Batasuna que comparecieron en el tribunal, a los que considera «delegados» o «enlaces de ETA» en la formación política y acusa de pertenencia a banda armada.
El magistrado afirma que «la responsabilidad de estas personas, a lo largo del tiempo, en las diferentes Mesas Nacionales u organismos de representación de la coalición suspendida les hacen merecedores de una medida grave sobre su situación», y decreta la fianza que había solicitado la AVT. Tras las declaraciones de los diecinueve imputados, el abogado de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, Pedro Cerracín, pidió que decretara su prisión eludible bajo fianza (libertad bajo fianza) de 12.000 euros.
El juez -que sólo ha eximido del pago de la fianza a José Antonio Egido- también ha fijado para todos los imputados la obligación de comparecer cada viernes en el juzgado más próximo a su domicilio, medida ésta solicitada tanto por el letrado de la AVT, como por el fiscal. Los dirigentes de Batasuna deberán depositar los 12.000 euros «en un plazo no superior a cuarenta y ocho horas; y, caso de no hacerlo, se procederá a su ingreso en prisión».
Además de Egido, Jon Idígoras, Adolfo Araiz, Karmelo Landa, José Luis Elkoro, Joseba Permach, Floren Aoiz, Josu Iraeta, Juan Carlos Rodríguez, Mikel Arregi, Esther Agirre, Sabino del Bado, Miren Jasone Manterola, Juan Pedro Plaza, Santiago Hernando, Jon Aldasoro, Kepa Gordejuela, María Isabel Mandiola y Segundo López de Aberasturi comparecieron en la Audiencia Nacional.