ETA asesinó ayer tarde en Madrid a un guardia civil e hirió a otro agente en un tiroteo que miembros del instituto armado mantuvieron con un comando que se encontraba en un vehículo estacionado en la vía de servicio de la carretera de A Coruña, en el que también resultó herido grave un etarra. El comando de ETA que protagonizó el tiroteo pretendía atentar en la capital «posiblemente mañana (por hoy)», según desveló el delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Javier Ansuátegui.
El ministro del Interior, Angel Acebes, dijo que las Fuerzas de Seguridad buscaban a los dos presuntos etarras desde el atentado del pasado día 3 en Santander y precisó que el coche en el que viajaban los terroristas tenía más de 40 kilos de explosivos. Los hechos ocurrieron sobre las 15.40 horas cuando dos agentes de la Guardia Civil trataban de identificar a los dos ocupantes de un Ford Escort azul, robado en Francia y con las placas de matrícula falsas, que se había parado en la vía de servicio de la A-6, a la altura del kilómetro 38, en Collado Villalba, el cual había despertado la sospecha de los agentes.
En ese momento, uno de los dos ocupantes del vehículo sacó un arma de fuego y disparó a bocajarro contra los guardias civiles, uno de los cuales, Antonio Molina Martín, de 27 años y natural de Melilla, falleció minutos después, mientras que el otro, A.O., resultó herido en un brazo y fue trasladado al hospital Puerta de Hierro, hasta donde se desplazó el ministro del Interior, Angel Acebes.
De los dos miembros del comando, Gotzon Aranburu Sudupe, resultó herido grave y se encuentra hospitalizado en el mismo centro que el agente herido, mientras que su compañero, Jesús María Etxeberría Garaikoetxea, consiguió fugarse en dirección a A Coruña en un Renault Clio robado a punta de pistola a una mujer con la que huyó en un principio y dejó en libertad poco después. Etxeberría fue detenido anoche en San Sebastián, tras abandonar el coche en Valladolid.