El Ministro del Interior, Angel Acebes y el consejero vasco del mismo ramo, Javier Balza, se reunieron ayer en Madrid para tratar cuestiones que afectan a la política de Euskadi. Ambos mantuvieron planteamientos distintos en torno a la solicitud del Gobierno de Ibarretxe de ampliar la plantilla de la Ertzaintza. Así, mientras que Balza insistió en aumentar la plantilla de la Policía Autonómica y argumentó que el Gobierno vasco tiene capacidad jurídica para adoptar la decisión de forma individual, aunque de momento no lo hará, Acebes insistió en que un aumento de plantilla se debe realizar por los cauces legalmente establecidos.
El representante vasco se comprometió a «abrir un periodo de reflexión» para estudiar la ampliación de la Ertzaintza, aunque dijo que éste sería «corto» por las necesidades operativas y Acebes explicó que el aumento de policías tiene que ser decisión de la Junta de Seguridad y la Comisión Mixta del Cupo «y no a base de imposiciones, ni de decir que si no se adopta el acuerdo se acogerá de manera unilaterial». Los dos cargos abordaron también el incremento de la seguridad de las sedes del Partido Popular y del PSE en el País Vasco, a consecuencia de la amenaza vertida por la organización terrorista ETA en un reciente comunicado.
En este punto sí llegaron a un acuerdo y anunciaron que la Ertzaintza y la Consejería de Interior del Gobierno vasco asumirán la responsabilidad de la seguridad de las sedes en el País Vasco, y que en el resto de España, incluida Navarra, ésta recaerá en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Respecto a las leyes que en estos momentos se están tramitando sobre las relaciones entre las policías europeas y españolas en el marco de la cooperación internacional en la lucha contra la delincuencia y el terrorismo, Balza mostró a Acebes su interés de incluir en tales foros a la Ertzaintza, a través de la tramitación de las mismas por parte de los grupos parlamentarios. Este planteamiento fue rechazado por el Gobierno central.