La comunidad internacional ha pedido a España y Marruecos que trabajen por lograr un arreglo pacífico del contencioso sobre el islote de Perejil, recuperado ayer por tropas españolas. El presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, matizó una declaración en la que sugería la retirada de Perejil de las fuerzas armadas españolas y parecía proponer una mediación comunitaria. La Comisión difundía una declaración escrita en la que Prodi se hacía eco del «compromiso de España» de restablecer la situación anterior a la ocupación marroquí del 11 de julio, y dejaba claro que Bruselas no ha propuesto «mediación alguna».
El Alto Representante de la Política Exterior y de Seguridad Común de la U E, Javier Solana, expresó su solidaridad con España a la ministra española de Asuntos Exteriores, Ana Palacio, así como su satisfacción por el compromiso español de restablecer el statu quo en el islote de Perejil. La OTAN juzgó que «se ha restablecido» el «statu quo» en Perejil, al tiempo que los socios de España en la UE reiteraron su solidaridad y apoyaron el compromiso español de volver a la situación anterior a la crisis y buscar una solución dialogada. «Estamos satisfechos de que se haya restablecido el statu quo», dijo a un portavoz de la OTAN, después de que el embajador español, Juan Prat, diera cuenta a los aliados en el Consejo Atlántico, máximo órgano de decisión de esta organización que reúne a los representantes permanentes de los diecinueve países aliados.
El Gobierno de EEUU también defiende el regreso a la situación del 10 de julio en relación con la disputa que mantienen España y Marruecos por el islote de Perejil, manifestó ayer el portavoz del Departamento de Estado, Richard Boucher. Representantes del Ministerio británico de Asuntos Exteriores instaron a Marruecos y España a «mantener la calma» en el conflicto acerca del control del islote de Perejil. Fuentes del Ministerio indicaron que el Reino Unido considera a ambos países como «amigos» e indicó que «nos gustaría que resolvieran esta disputa de modo pacífico a través de la negociación y el diálogo».
El secretario general de la Liga Arabe, Amro Musa, pidió al Gobierno de Madrid la retirada de los soldados. En un comunicado de la Liga Arabe, Musa manifiesta «su profundo pesar por el uso de la fuerza», que, a su juicio, «no servirá a los intereses de dos países vecinos, Marruecos y España, y a sus relaciones». El secretario general de la ONU, Kofi Annan, lamentó las acciones unilaterales emprendidas sobre la isla de Perejil y se ha ofrecido a mediar en el conflicto entre Marruecos y España. Según la portavoz de la ONU, Hia Juang, Annan «lamenta toda acción unilateral llevada a cabo hasta el momento y espera que ambas partes se adhieran a su entendimiento original para resolver el asunto por medios pacíficos».
El Gobierno de Portugal «comprende» la «reacción de las autoridades españolas» al recuperar la isla de Perejil, «porque supone el regreso al statu quo anterior». «El Gobierno portugués, que mantiene relaciones de amistad y buena vecindad con los gobiernos de España y Marruecos, apoyará todos los esfuerzos tendentes a la resolución de esta cuestión por la vía pacífica a través del diálogo», según una nota oficial. La televisión argelina informó ayer, sin hacer comentarios, de la acción emprendida por España para desalojar a los militares marroquíes que habían ocupado el islote de Perejil, de la misma forma que lo hizo la agencia oficial de prensa APS. La posición oficial de Argelia sobre el caso fue ofrecida ayer por el ministro delegado de Asuntos Exteriores, Abdelkader Messahel, al anunciar que el Gobierno argelino rechazaba la política de hechos consumados y deseaba un solución rápida de la crisis entre España y Marruecos.