El primer ministro marroquí, Abderramán Yusufi, se comprometió ayer ante el presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, «a mantener la situación bajo control, sin una mayor escalada y a trabajar en una solución muy rápida» sobre el contencioso del islote Perejil, informó el Ejecutivo comunitario. Yusufi expresó ese compromiso a Prodi en una conversación telefónica mantenida ayer a iniciativa del presidente de la Comisión Europea.
Después de mantener «un largo coloquio» con el jefe del Gobierno marroquí, Prodi informó, también por teléfono, de esa conversación a la ministra española de Asuntos Exteriores, Ana Palacio.
Prodi considera, según el texto, «que se trata de un problema que requiere esencialmente una solución bilateral, pero que nos preocupa a todos porque el Gobierno español ha pedido al presidente de la Comisión que contacte con el primer ministro de Marruecos para expresarle la gran preocupación de Europa sobre la evolución de este asunto».
Mientras, la Liga Arabe expresó anoche su apoyo a Marruecos, uno de sus países miembros, en el contencioso del islote Perejil, donde los militares marroquíes desplegaron un «puesto de observación». «La posición de la Liga es la de respaldar a Marruecos en el caso del islote Leila, que es marroquí», declaró en El Cairo el secretario general de la organización, Amr Mussa. Mussa hizo estas declaraciones tras mantener una conversación telefónica con el ministro de Asuntos Exteriores marroquí, Mohamed Benaissa.
Los fastos de la boda del rey Mohamed VI prosiguen sin la
aparición pública de la esposa
Los actos de la boda del rey Mohamed VI con Salma Bennani
prosiguieron ayer en medio de las cábalas sobre el papel que
desempeñará en estos festejos la esposa del monarca. La única
imagen de la novia durante estas celebraciones es una foto que
publicó ayer el diario oficialista «Le Matin du Sahara», en la que
la princesa Salma aparece sentada al lado de su esposo y de otros
miembros de la familia real, pero con la cara y el cuerpo cubiertos
totalmente con una túnica.