El presidente de honor del PP vasco, Jaime Mayor Oreja, aseguró ayer que «no hay una reclamación de competencias pendientes, hay una declaración de guerra política a España y Francia reivindicando las siete provincias y la autodeterminación, y la excusa es el desarrollo pendiente de la autonomía». El PP y el PSE acusaron ayer a los nacionalistas de haber reeditado el pacto de Estella con la aprobación del dictamen en el que se defiende la autodeterminación y se conceden dos meses de plazo al Gobierno para completar las transferencias al País Vasco, un pacto con Batasuna que el PNV niega.
La comisión de autogobierno del Parlamento celebrada ayer ha ratificado, con los mismos votos que ayer, es decir, PNV-EA-IU a favor y la abstención de Batasuna, y PP y PSE en contra, el dictamen de la ponencia, como paso previo a que el próximo viernes sea aprobado por el pleno.
Además, ayer se anunció algunas reacciones contrarias a este dictamen: los socialistas vascos convocarán movilizaciones en defensa del Estatuto, a la vez que las instituciones alavesas, en las que tienen mayoría el PP y el PSE, se pronunciarán en las próximas semanas, ya que se presentarán iniciativas para ello en las Juntas Generales y el Ayuntamiento de Vitoria.
En la comisión celebrada ayer en el Parlamento de Vitoria, PP y PSE acusaron al PNV de reeditar el pacto de Estella, lo que éste negó. Así, Fernando Maura (PP) subrayó que se cubre «una etapa más en la carrera soberanista», mientras que el socialista Jesús Eguiguren agregó que «se reedita el pacto de Estella sin pedir ni siquiera a cambio la tregua como se pidió entonces».
Las acusaciones fueron respondidas por Joseba Egibar (PNV), quien aseguró que «aquí no hay Lizarra ni negociaciones, cada uno sabrá porque se abstiene», en referencia a Batasuna. La misma tesis de no negociación fue defendida por el portavoz del Gobierno Vasco, Josu Jon Imaz, quien incidió en que «lo que haga Batasuna a este Gobierno simplemente no le importa».