El alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, decidió ayer suspender el pleno del ayuntamiento media hora ante la negativa de Batasuna a votar de «viva voz» e insistir en hacerlo exhibiendo carteles en protesta por la Ley de Partidos.
Los ediles de Batasuna habían colocado en sus escaños pancartas en contra de la nueva norma que el alcalde exigió que retiraran pero que, finalmente, tuvieron que ser sacadas por la Policía Municipal.
Tras la retirada de los carteles por las Fuerzas de Seguridad, los batasunos, que consideraban el pleno como una sesión con un «significado especial» por el salto «peligrosísimo dado por las Cortes en contra del movimiento independentista», decidieron amordazarse con banderas españolas que habían portado para la ocasión y procedieron a votar con carteles en euskera en los que se leía «Ez» (No), en lugar de proceder a hacerlo de viva voz.
Ante este gesto, el portavoz del Grupo Popular expresó su enérgica protesta y advirtió que se debe poner límite porque cada vez es más complicado hacer política en este país y llevar un pleno democrático. «No se les debe dejar hacer esas parafernalias fascistas», afirmó y rogó al alcalde, quien dijo estar ya acostumbrado a este tipo de gestos de protesta, que cumpla el reglamento y los concejales abertzales voten como todos. Los socialistas lamentaron también estos actos en los que se permite «saltar a la torera» el orden del día y tachó de «espectáculo» la situación.
El portavoz de Batasuna increpó a los constitucionalistas por «hacerles callar de ese modo» y y los tachó de «fascistas». En ese momento, los ediles de las formaciones aludidas abandonaron el salón y el alcalde suspendió el pleno. Media hora después se reanudó sin la presencia de populares y socialistas y los votos escritos de los abertzales se dieron por buenos.