El Índice de Precios de Consumo (IPC) subió el 0'4 por ciento en mayo, con lo que la tasa de inflación acumulada se situó en el 2'5% y la interanual se mantuvo en el 3'6%, según el Instituto Nacional de Estadística (INE). La inflación subyacente "excluidos alimentos frescos y productos energéticos" también aumentó el 0'4 y se situó en el 4'1% en tasa interanual, dos décimas más que en abril.
Según el INE, en mayo los grupos más inflacionistas fueron vestido y calzado, con un encarecimiento del 1'1%, y alimentos y bebidas no alcohólicas, menaje y hoteles, cafés y restaurantes (0'4).
Tanto el Gobierno como los sindicatos centraron sus críticas en el sector empresarial al que acusaron de continuar incrementando sus márgenes de beneficios y no contribuir a la contención de precios, mientras que los empresarios alertaron de la pérdida de competitividad y empleo que conllevará el continuo aumento del diferencial de inflación con el resto de países de la UE.
El ministro de Economía, Rodrigo Rato, admitió que la evolución del Índice de Precios al Consumo «no es positiva» y que el diferencial con la UE «no se está comportando bien» y se sitúa «por encima de nuestros intereses respecto a competitividad».
Atribuyó la subida del IPC a los servicios y la alimentación y explicó que el mayor aumento de los precios en España que en el resto de la UE se debe a su mayor crecimiento, aunque aseveró que España cumplirá en el 2002 el Pacto de Estabilidad.