El Debate sobre el estado de la Nación se celebrará los días 15 y 16 de julio. Las protestas de PSOE e IU por este retraso, que el Ejecutivo justifica por la Presidencia española de la UE, no evitarán, previsiblemente, que se varían las fechas propuestas por Moncloa. El portavoz parlamentario socialista, Jesús Caldera, aseguró que el Gobierno «quiere esconder el debate a los españoles». Esa es la propuesta que hizo llegar ayer el Gobierno de Aznar a la Junta de Portavoces. Esta propuesta se presenta como inamovible, lo que ha despertado las iras de los partidos de izquierda.
El PSOE aceptó celebrar el debate en julio para no interferir con la Presidencia española de la UE y su posterior debate en el Congreso, pero exigió que fuera durante las dos primeras semanas del mes. «Quiere esconder el debate a los españoles», dijo Jesús Caldera, ya que en esas fechas muchos ciudadanos habrán comenzado ya sus vacaciones de verano. Lo que el Gobierno quiere evitar es que se dé publicidad al «espectacular» aumento de los precios y del paro o al crecimiento de la inseguridad ciudadana. «Sólo una fuerte presión desde la opinión pública», explicó, podría modificar la postura del Gobierno, puesto que es quien tiene la facultad de escoger la fecha.
IU, por su parte, había exigido que se respetase la fecha habitual, es decir, mayo o junio. Su portavoz parlamentario, Felipe Alcaraz, cree que el Gobierno ha actuado con «alevosía y estivalidad». «Es asombroso e inadmisible, una atrocidad parlamentaria y una vulneración de los principios de la sociedad que no debe ser permitida», explicó. A su juicio, el Gobierno pretende ocultar «el fracaso de sus políticas y el inicio de su declive», y criticó al PSOE por haber aceptado que la gran cita parlamentaria fuera en julio. Para el PP, estas protestas son «ridículas». Luis de Grandes aseguró que el Gobierno ya había anunciado que el Debate sería en julio, y que lo único que se ha hecho es «concretar la fecha». La única razón, dijo, para retrasar su celebración es la agenda del Gobierno en la Presidencia de la UE.