El coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, afirmó ayer tener constancia de la existencia de «algunas notas» de los servicios de información del Gobierno «que apuntan a que no es tan claro» que la reforma de la Ley de Partidos Políticos facilite la lucha legal y penal contra el terrorismo. Llamazares instó al Gobierno a que diga a los ciudadanos si los servicios de información «han dicho que "la Ley citada" facilita o es un obstáculo para la lucha antiterrorista. Se lo pregunto a Aznar "insistió" porque sé que ha habido algunas notas de los servicios de información».
La contestación no se hizo esperar y el desmentido llegó desde el Ministerio del Interior. Un portavoz del departamento que dirige Mariano Rajoy rechazó que informe alguno de los servicios de Información de Policía, Guardia Civil o CNI "antiguo CESID" adviertan de que la ilegalización de Batasuna dificultará la lucha contra el terrorismo y obligará a adoptar nuevas estrategias e infraestructuras. Ayer se dio a conocer que el proyecto de Ley de Partidos será aprobado por el Congreso en un pleno extraordinario que se celebrará el 4 de junio, mientras que el Senado ha convocado otra sesión plenaria el 25 del mismo mes, con la finalidad de acometer su aprobación definitiva y asegurar que en julio ya esté en vigor.
Las convocatorias de ambos plenos fueron acordadas ayer en sendas reuniones celebradas por las Mesas y las juntas de portavoces de ambas cámaras, cuyas disponibilidades de fechas han sido coordinadas para garantizar la aprobación de la ley antes de que acabe junio. El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, se mostró convencido de que el PNV no promoverá la desobediencia civil en respuesta a la Ley de Partidos, aunque sí dijo que el partido de Xabier Arzalluz agotará todas sus posibilidades de protesta.
Al igual que su líder, Patxi López cree que el PNV y el Gobierno vasco seguirán oponiéndose a la reforma, aunque cree que ya es suficiente. «Están cuestionando todo el día la legitimidad del poder judicial y del marco en el que nos desenvolvemos», dijo, y «así no se consigue serenar un país excesivamente crispado, no se consigue más que desestabilizar y tener inseguridad para todo el mundo».